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Aquí podrás saber un poco más acerca de cada uno de los diferentes campos de la psicología sobre los que trabajo.

Psicoterapia infantil

En la consulta atendemos los problemas emocionales de los más jóvenes como ansiedades, miedos, depresión infantil, problemas emocionales asociados a situaciones de acoso, etc. Abordamos también problemas como el TDAH y problemas de comportamiento. Trastornos de la vinculación y elaboración de elementos vitales traumáticos o difíciles como procesos de adopción, duelo o abusos y malos tratos en la infancia. Acompañamos en el trabajo psicoterapéutico a chicos/as con Trastornos Generalizados del Desarrollo.

El trabajo que hacemos en la consulta en la infancia parte y se construye a través del juego y de la relación de vínculo que se desarrolla entre el niño/a y la terapeuta dentro de un espacio seguro y protegido. El juego es la forma en la que los niños aprenden a resolver los conflictos y a elaborar los temores. De esta forma ellos consiguen hablar de sus preocupaciones sin sentirse descubiertos amenazados o con culpa por lo que expresan.

Es frecuente que nos encontremos en la infancia problemas emocionales asociados a una dificultad para la regulación de los afectos, por ejemplo rabietas desproporcionadas, miedos que dificultan la correcta autonomía o independencia de los más pequeños. Los problemas emocionales y las dificultades para la regulación de los afectos y de los impulsos conllevan con frecuencia problemas escolares y déficits de atención o impulsividad así como problemas tanto en casa como con las amistades.

Como consideramos que es importante trabajar con todos los sistemas relacionados con el niño dentro del proceso psicoterapéutico se realizan sesiones con los padres para ayudarles a comprender y a adquirir herramientas de manejo y comunicación con sus hijos e hijas. Además, nos parece importante poder mantener una coordinación directa con los centros escolares y poder cooperar con sus profesores para favorecer el desarrollo y avance del menor.

Psicoterapia en la adolescencia

En la consulta abordamos problemas emocionales en la adolescencia como ansiedad, depresión o ideas obsesivas. También atendemos problemas de consumos, dificultades en las relaciones sociales o conductas desadaptadas como violencia, autolesiones, conductas impulsivas. Atendemos trastornos de la personalidad, experiencias traumáticas como pérdidas, abusos físicos o sexuales, relaciones de pareja abusivas y casos de Trastorno de la Conducta Alimentaria.

La adolescencia se caracteriza por ser una etapa de crisis donde el hasta ahora niño debe atravesar el duelo por su infancia y comenzar a asumir las realidades y responsabilidades del mundo adulto. Los adolescentes se exponen así a grandes preguntas como ¿quién soy yo? ¿Qué quiero ser en el futuro? ¿Cómo quiero ser? Todas estas preguntas forman parte del proceso normal de construcción de una identidad propia. Sin embargo, es muy frecuente que en este momento de su desarrollo aparezcan múltiples temores, como por ejemplo el temor a la muerte, a lo desconocido así como preguntas existenciales sobre la vida que pueden ocasionar en los adolescentes un fuerte sufrimiento emocional y ansiedad.

Hay casos donde estas reflexiones no están tan accesibles para el adolescente y conecta con sentimientos de vacío, de soledad y de tristeza o confusión que no sabe cómo gestionar, dando lugar a conductas menos adaptativas como consumos, adicciones a sustancias o a nuevas tecnologías, autolesiones o conductas de agresividad y violencia.

Si a esta situación, ya de por sí compleja, añadimos dificultades familiares para la gestión de los conflictos, estilos de comunicación disfuncionales o sentimientos de confusión sobre cómo abordar la adolescencia puede agravarse además estos problemas emocionales en los adolescentes y pueden tener lugar episodios de violencia filio-parental.

El grupo de amigos en la adolescencia se convierte en el referente principal y por tanto los conflictos con las amistades o la dificultad de encajar en un grupo son una fuente elevada de sufrimiento para los adolescentes. Además, la autoestima en la adolescencia se ve con frecuencia dañada y fácilmente herida y si los adolescentes poseen rasgos de personalidad insegura o con tendencia a agradar a los demás aumenta la posibilidad de que pueda involucrarse en dinámicas insanas, en relaciones de amistad o de pareja de dependencia, entre otras.

La salida a la sexualidad suele ser otro elemento de conflicto habitual en este periodo evolutivo, no sólo porque hay una elección de su identidad sexual sino también porque comienzan a sentarse las bases de las relaciones afectivas y es el momento de poder trabajar la estima de uno o una misma que impida su implicación en relaciones de abuso o dependencia. Otro elemento importante en esta edad son los cambios corporales y es una etapa de riesgo para la aparición de los Trastornos de la Conducta Alimentaria.

Teniendo en cuenta lo compleja que es la comunicación con el adolescente, en el proceso de psicoterapia incluimos en todo momento a los padres con el objetivo de ayudarles a adquirir herramientas de comunicación y gestión de conflictos con el adolescente, ayudándoles a comprender mejor la casuística de esta etapa evolutiva. También trabajamos en coordinación con el instituto si fuera necesario.

Psicoterapia en adultos

Atendemos a los problemas emocionales de los adultos. En estos casos el malestar emocional puede manifestarse de diversas formas, a veces con ansiedad, estrés, depresión, ideas obsesivas, problemas de insomnio, problemas psicosomáticos (dolores de cabeza, tensión muscular, problemas de estómago), adicciones, etc. Otras veces podemos verlo en el ámbito relacional con problemas a nivel afectivo y de pareja, problemas familiares o problemas en el trabajo.

A veces podemos encontrar un factor causal claro y otras veces no. O incluso podría ser una acumulación de experiencias que en un determinado momento se manifiestan, nos desbordan y nos hacen parar y darnos cuenta del sufrimiento.

Si además hemos experimentado una infancia o adolescencia turbulenta, con experiencias traumáticas esto puede acrecentar más los problemas emocionales o dinámicas de relación de dependencia o no saludables.

También nos hemos podido ver atravesados por una circunstancia impactante que nos ha desbordado y dejado en jaque, como puede ser un fracaso amoroso, laboral o una pérdida traumática, por ejemplo con lo que estamos atravesando ahora con la crisis del COVID-19.

El espacio de terapia es un lugar seguro y confidencial donde el objetivo es que puedas sentirte acompañado mientras exploras tu sufrimiento y a través de la relación terapéutica ir encontrando dinámicas de relación con los demás o con uno mismo que nos llevan una y otra vez a sufrimientos. De esta manera, cuando uno toma conciencia de sus puntos ciegos y puede hacerlos conscientes se abren nuevas formas de afrontamiento de dichas situaciones y por tanto se alivia el sufrimiento.

Sabemos que los procesos psicoterapéuticos son procesos que pueden ser largos, dado que conllevan un cambio estructural de la personalidad y de patrones y mecanismos de defensa con los cuales llevamos actuando toda la vida. Si conectamos con el sufrimiento emocional es porque dichos mecanismos de afrontamiento han dejado de ser funcionales en nuestra vida y a través del conocimiento personal que aporta la psicoterapia y de la relación terapéutica podremos explorar nuevas formas de ser y estar en las relaciones con uno mismo y con los demás.